Ya está. Sí, lo he hecho. He creado un blog y
aunque haya sido como excusa para los deberes
de filosofía acabaré enganchada a él como
ocurrió con el Fotolog o el Tuenti.
E innauguro esta primera entrada diciendo que
ayer se abrió una joyita y nunca mejor dicho en
Madrid: ¡un Tiffany's!
Se encuentra en la calle Ortega y Gasset, un
paraíso "joyil" de 1.524 metros cuadrados.
La casa es conocida por aparecer en la película
"Breakfast at Tiffany's" traducida al castellano
como "Desayuno con diamantes".
Para las que están en mi caso, es decir, las que
no podemos permitirnos nada (por el momento)
tendremos que conformarnos con pasar por de-
lante del escaparate y lanzar un suspiro pero...
como Holly, nadie puede prohibirnos comprar un
par de croissants y desayunar observando el
escaparate ¿no?
Besitos.
aunque haya sido como excusa para los deberes
de filosofía acabaré enganchada a él como
ocurrió con el Fotolog o el Tuenti.
E innauguro esta primera entrada diciendo que
ayer se abrió una joyita y nunca mejor dicho en
Madrid: ¡un Tiffany's!
Se encuentra en la calle Ortega y Gasset, un
paraíso "joyil" de 1.524 metros cuadrados.
La casa es conocida por aparecer en la película
"Breakfast at Tiffany's" traducida al castellano
como "Desayuno con diamantes".
Para las que están en mi caso, es decir, las que
no podemos permitirnos nada (por el momento)
tendremos que conformarnos con pasar por de-
lante del escaparate y lanzar un suspiro pero...
como Holly, nadie puede prohibirnos comprar un
par de croissants y desayunar observando el
escaparate ¿no?
Besitos.
Muy bue post, Sara, sigue así. El blog tiene un apinta estupenda
ResponderEliminarsaludos
ahhhh beautifuleee!! sara sigueme a mi tambien, no???
ResponderEliminarnecesitan la vaca de ben&jerys??
Hola, Sara. ¡Cómo os hace currar Pedro haciendo que cada uno escribáis vuestro propio blog!
ResponderEliminarComparado con esto, lo de El Marimoli era un juego de niños, ¿eh?
Me has tocado la fibra sensible con Desayuno con diamantes. La he visto tropecientas mil veces y me sigue enganchando el ambiente de melancolía, la majestuosa Audrey Hepburn que parece que sólo puede estar en un bloque de pisos destartalado por accidente o por error; el joven escritor fracasado y de vuelta de todo que, tocado por la varita mágica del amor, cree que otra vida es posible, una vida maravillosa. Por estas y por muchas razones más, se trata de una verdadera obra maestra.
Por cierto, yo me siento como los protagonistas de la peli, a mí también me falta algo. Echo de menos el Marimoli y os echo de menos a vosotros.
Un saludo de Juanjo.